miércoles, 30 de enero de 2013

La anaconda tragona


Recuerdo cuando era pequeña que al leer “El Principito” vi el dibujo de la boa constrictor que se había comido un elefante, ese dibujo me quedó siempre en la retina y eso que era de lo más sencillo.
Bien, pocos años después vino desde Venezuela un tío mío que se marchó hace muchos años allí como misionero y que cada vez que viene a España, el pobre se queda helado como un chuzo aunque sea pleno Agosto.
Vivía en Cumanacoa en plena selva amazónica y recién llegado, nos contó que yendo paseando por uno de los senderos que hay por la selva, se encontró a una anaconda que se había comido una vaca estaba en medio del camino, con la cabeza de la vaca saliéndole por la boca haciendo la digestión..
Enseguida me vino a la mente el dibujito del principito.
Os voy a hablar un poco de las boas constrictor y luego os pondré un vídeo impactante en el que veremos cómo una de estas criaturitas después de zamparse a una vaca, como no puede hacer la digestión, la regurgita, que como sabes, es que la vomita.(Todo muy dulce)
Información sobre este “inocente animalillo”:
Las boas, las serpientes de mayor tamaño, entre las cuales está la anaconda, que mide 12 metros de largo.  Para matar a sus presas emplean sus fuertes músculos corporales,con los cuales apretujan tanto a la víctima que no la dejan respirar y terminan matándola . Se lanza sobre ella cuando está a su alcance, enrolla su cuerpo alrededor de su victima, formando varios anillos y lo aprieta hasta que le provoca la muerte.
Una vez muerta la presa entera comienza a ser engullida lentamente, gracias a la capacidad que tiene la boa de abrir desmesuradamente su boca. En el estómago, los fuertes jugos digestivos degradan completamente al pobre incauto.Se sumerge en alguna charca y espera a las presas al acecho; se camufla  y debido a la disposición de los ojos y de los agujeros nasales,  le permite mantener parte del rostro fuera de la superficie del agua, con lo cual puede observar a sus potenciales presas sin ser observada.
Esto debió de pasarle a una anaconda como la que vió mi tío, pero que no pudo digerir su presa y por tragona,tuvo que regurgitarla .(Esto no le sirvió de nada a la pobre vaca)